VIAJE ARGENTINA EN SILLA DE RUEDAS DE 14 DE OCTUBRE AL 2 DE NOVIEMBRE DE 2017 (PARTE I)
Este año decidimos viajar a Argentina, organizamos el viaje en casa, decidimos que queremos visitar, y contactamos con una Agencia de viajes que hemos visto por Internet, y que organiza viajes accesibles, se llama Travel Xperience, ha sido una gran idea, la persona que se encargó de nuestro viaje se llama Rodrigo, tremendamente competente. 100% recomendable esta Agencia.Visitamos: Iguazú, Clalafate, Ushuaia, Puerto Madryn y Buenos Aires.
DÍA 14
A las 20:10h cogemos un vuelo para ir a ARGENTINA. Volamos con Aerolíneas Argentinas, en el vuelo AR1133, en un Airbus Industrie A330 JET, la duración del vuelo es de 12 horas. La facturación perfecta, todo facilidades, llevábamos la Batec y ningún problema, se rellena un documento para especificaciones de la Batec y de la silla. Puntualidad inglesa. Asientos en la primera fila, bastante espacio, cómodos.
DÍA 15
Después de 12 horas llegamos al aeropuerto de Ezeiza en Buenos Aires, son las 4:20 de la mañana, hay 5 horas de diferencia horaria, recogemos maletas y de nuevo facturar para ir a Iguazú, nos toca esperar, hasta las 8:00h no sale el avión, el trayecto dura menos de dos horas. Nos están esperando para ir al hotel, servicio privado, y sorpresa, furgoneta accesible, con plataforma, ¡qué bien!, sería la única del viaje, luego nos arreglaríamos con la predisposición de la gente, que por cierto, ha sido magnífica.

El pueblo de Puerto de Iguazú, está en la provincia de Misiones, a 17 km de las Cataratas de Iguazú, nos sorprende por lo estropeado y sucio que está. No todas las calles están asfaltadas, algunas son de ripio (una palabra que nos ha llamado la atención, son de grava).
Nos alojamos en el hotel Amerian Portal del Iguazú, está muy bien ubicado, está en la zona denominada triple frontera donde confluyen el rio Iguazú y el Paraná, el río Iguazú nos separa del estado brasileño de Paraná, y el río Paraná nos separa de Paraguay. Algunos atractivos turísticos al lado del hotel son el Hito Tres Fronteras y la feria artesanal ubicada en el complejo La Aripuca
Desde la habitación del hotel vemos las tres fronteras, es un hotel bonito y grande, con una gran piscina exterior y otra con jacuzzi interior, la habitación y el baño es amplia y bien adaptada, siempre tenemos problemas con las barras de la ducha, siempre falta de un lado. La habitación tiene dos camas de 150cm cada una, es muy amplia.
Este día, nos vamos a conocer el pueblo. Es domingo y no hay mucha vida en la ciudad o pueblo, las aceras, por llamarlas así, son en muchos tramos intransitables, menos mal que hemos llevado la batec, tenemos que ir muchos tramos por la carretera, hay normativa en cuanto a accesibilidad, hay rebajes en las aceras, pero son insalvables.
DÍA 16
A las 8:00h salimos para ver las Cataratas de Iguazú, servicio privado, conductor, guía y asistente para empujar la silla, esto es un lujo, prescindimos del ayudante, con la batec no es necesario. El guía, se llama Sergio, es muy competente y muy simpático.
Llegada al Parque Nacional de Iguazú, nos indican que la entrada de los parques no entra en las excursiones y hay que pagarlas aparte, no lo sabíamos. En la taquilla con el carnet de persona con movilidad reducida, no paga ni él ni el acompañante, así en todos los parques, museos… argentinos, en Brasil si se paga.
Los coches se quedan fuera, el recorrido puede ser a pie por un sendero entre la selva, o se puede también coger un tren que te acerca a la estación, nosotros optamos por el sendero, nos gusta caminar.

El paseo por el sendero es precioso, la gente prefiere coger el tren, hay poca gente por el sendero y solo se oye el ruido de los pájaros. El camino es algo más de 1 km totalmente accesible hasta llegar a la estación, desde aquí sale un tren que se llama Tren de la Selva, es un circuito de trenes ecológicos que van bordeando el rio y llegan hasta los accesos a las pasarelas.
A través de unas pasarelas, nuevas y totalmente accesibles, con un recorrido de algo más de 1 km, llegamos a la Garganta del Diablo, indescriptible su belleza, el paisaje, los sonidos, el río es extensísimo, las aguas turbulentas, hay mucha bruma del vapor del agua, se ven tortugas, lagartos, multitud de mariposas, coatís, pájaros, garzas, monos…
Lo peor, que somos mucho los que vamos a ver las Cataratas y las pasarelas son estrechas, hay demasiada gente, no puedes disfrutar en silencio de ellas. Pero impresiona, me traslado a la película La Misión y pongo música mentalmente al paisaje.

Continuamos la ruta, ahora nos dirigimos a la visita del Paseo Superior, veremos las Cataratas desde arriba, vemos el Salto Dos Hermanas, el Bossetti, el Chico…. preciosas, imponentes, hace calor, pero te salpica el vapor de agua y se agradece. Abajo se ve la isla San Martín. He de decir que las fotos y los videos no hacen honor a lo que vives y sientes allí.
Continuamos para la vista del Paseo Inferior, hasta llegar a él, el camino es de piedras, luego de nuevo pasarelas, el paisaje cambia totalmente en la parte inferior.
Comenzamos viendo el salto Lanusse, el salto Álvar Núñez Cabeza de Vaca, se llega a un espléndido punto panorámico desde donde tendrá una primera vista de la Garganta del Diablo. Avanzando un poco más se observa la isla San Martín y a su derecha el salto homónimo. Al final del sendero se encuentra el salto Bossetti..

Por la tarde de vuelta al hotel, llenos de emociones, con mil imágenes en la retina, un baño en la piscina y a relajarse y charlar con otros turistas. Hoy cenamos en el hotel, probamos un pescado del río Iguazú, que se llama surubí, exquisito.
DÍA 17
De nuevo nos levantamos a las 6:00h de la mañana, a las 8:00h, nos vamos a ver la cataratas por la parte de Brasil. Tenemos que pasar la frontera, hay muchísimo tráfico, nos comenta el guía que pasan a Brasil, a la ciudad de Foz, para hacer la compra, y a Paraguay para comprar electrodomésticos y electrónica, es mucho más barato. Argentina está muy cara, nos ha sorprendido.
Llevamos pasaportes, atravesamos el puente internacional Tancredo Neves, tardamos un rato en pasar. Notamos que la parte Brasileña está más cuidada, más limpia, más organizada. Hay un centro comercial en la frontera, en la zona argentina, el Duty Free Shop, a la vuelta vemos que la gente va cargada de bolsas, tiene que pagar en la aduana impuesto si se pasan de gasto.
Del otro lado del río Iguazú se encuentran las cataratas del lado brasileño. Son las mismas, ya que la naturaleza no tiene nacionalidades, pero desde el lado de Brasil pueden apreciarse los saltos de una manera distinta. Muchos dicen que desde Argentina se viven las cataratas y desde Brasil se ven, lo cierto es que Brasil solo tiene el 20% de las Cataratas y Argentina el 80%
Llegamos al Parque Nacional do Iguaçu, en Brasil, aquí tenemos que pagar para entrar al Parque, nos 16€ por persona. Hay que coger un autobús accesible para que nos acerque hasta el comienzo del trayecto, lo tienen muy bien organizado.
El área que el visitante puede conocer está constituida por un único circuito de pasarelas que se encuentra de frente a los saltos. Este circuito de pasarelas mide alrededor de 1.200 metros, con subidas y bajadas, hay varios tramos de escaleras, por lo tanto no es accesible, pero tienen un ascensor panorámico que te acerca al último tramo, al más visual.
Lo cierto es que desde este lado la visión es espectacular, tienes una visión panorámica de todas las cataratas.
De vuelta al hotel, un rato de relax en la piscina. Hoy vamos a ver el espectáculo del Hito de las Tres Fronteras, está a 50 m del hotel, es una gran fuente con luces de colores, y hay casetas de mercadillo, hacen una proyección de halografías sobre bailes tradicionales de los tres países, está bien.
Hoy nos vamos a cenar a El Quincho del Tío Querido, nos vamos en taxi, nos pedimos una ensalada con palmito y unos bifes de chorizo, (es un tipo de corte de la carne), con unas cervezas, muy rico. Tienen espectáculo.
DÍA 18
Nos levantamos a las 7:00h, preparamos maletas y a las 9:30h nos pasan a recoger para ir al aeropuerto. Servicio privado. A las 12:00h salimos para el Aeroparque Jorge Newbery, llegamos en menos de dos horas y desde aquí, sin bajar maletas, pasamos por mostrador para que nos asignen asiento y las 16:00h salimos para El Calafate, son tres horas de vuelo. Volar con Aerolíneas Argentinas ha sido muy fácil y muy cómodo, nos han puesto todas las facilidades.
Se acabó la accesibilidad de los coches, A partir de ahora son furgonetas, nos trasladan en servicio privado, el conductor, se llama también Sergio, es fantástico, y viene con la guía, Adriana, genial también, rápidamente busca ayuda y suben a Nel a la furgoneta. Los guías han sido todos estupendos, muy formados, muy facilitadores, pendientes de que Nel tenga todas las comodidades, lo han hecho todo muy fácil. Traslado al hotel Posada Los Álamos, precioso, dos camas grandes, espacioso, todo madera. Son dos edificios, uno para las habitaciones y salones y el de enfrente para los restaurantes, piscina, gym, bar.
Deshacemos maletas, nos dijeron que hacía mucho frio, no es para tanto, llevamos pantalón y camiseta térmicos, guantes y gorro. Hay 13º de máxima y 3 de mínima.

Nos vamos a explorar el pueblo, es más bonito que Iguazú, las casas más arregladas. Es una ciudad ubicada en la ribera meridional del lago Argentino, en la región de la Patagonia, en la provincia de Santa Cruz a unos 80 km del glaciar Perito Moreno.
Hay mucha tienda de ropa deportiva y de montaña.
Hoy nos vamos a cenar al hotel, el comedor es muy bonito, todo en madera. Tomamos un vino tinto muy bueno.
CONTINUARÁ………………
Post escrito por Marianela